Diseñar una mesilla de noche puede parecer un ejercicio sencillo, pero debemos confesar que nos ha resultado todo un reto, y es que, a veces los objetos aparentemente más sencillos nos ponen contra las cuerdas.
¿Cómo dar vida a un objeto personal que cumpla las necesidades del cliente y a su vez no se pierda en el escaso espacio que normalmente se le concede? ¿Cómo conseguir que no se convierta en un cubo de dos cajones?
Partimos de las premisas que nos dio nuestro cliente: - Una mesilla para un espacio pequeño - - Capacidad para guardar los diferentes objetos de un propietario ordenado - |
Tras muchas vueltas y en contra de nuestro método de trabajo,
apostamos todo a una carta, a un único diseño. Conseguimos un objeto limpio, con un solo frontal sin divisiones, con una gran funcionalidad interior, al contar con dos cajones (uno de ellos oculto).
Una estructura aparentemente exenta nos permite abrazar el mueble,
añadir una balda y da un poco de ambiente (de ahí el nombre) mediante una luz cálida integrada que se enciende acariciando la superficie. |
Cliente: Privado (Donostia - San Sebastián)
Materiales: Acero, Alistonado de Roble. Disponible en otros colores (Consultar) Disponible en tienda bajo pedido
Medidas: 74 x 45.2 x 46.5 cm
Materiales: Acero, Alistonado de Roble. Disponible en otros colores (Consultar) Disponible en tienda bajo pedido
Medidas: 74 x 45.2 x 46.5 cm